Mitori geiko


Finalmente he decidido a aportar mi granito de arena a la causa...

La reciente recomendación de Fernando ha dado nombre a algo que llevo apreciando desde hace mucho tiempo: mitori geiko. Este concepto es bastante simple; se trata de ser capaz de aprender y mejorar observando a un maestro (o compañero), sin embargo, como casi siempre, hay gato encerrado, ya que requiere algo difícil de lograr a las horas en las que podemos practicar: concentración. Y es que al contrario de lo que pueda parecer no se trata ni mucho menos de una actividad pasiva.


El concepto en sí mismo es básicamente lo que hacemos siempre en nuestra práctica diaria (o al menos eso se supone). Agudizamos nuestros sentidos para aprender la técnica que el maestro demuestra con el Uke de turno. Al principio los rudimentos y poco a poco nos vamos centrando en los detalles. Aunque estemos "cómodamente" sentados en seiza, la actitud siempre debe ser activa.

Indudablemente este trabajo tiene su máximo sentido durante los musei. Aunque el hecho de no hablar durante una clase pueda parecer extravagante, el resultado me parece extraordinario, y mitori geiko adquiere todo su significado. No hay posibilidad de explicación. No hay más remedio que estar atentos.

Siempre recordaré la sensación después del primer musei. Después de sentirme tremendamente torpe y dudar de mí mismo en las clases anteriores, ese día creo que empecé a comprender cómo se debe trabajar esto del Aikido, aunque supongo que será aplicable a cualquier Do que uno decida emprender.

En cualquier caso, mitori geiko no termina con la demostración del maestro. Mitori geiko es aplicable durante toda la clase, desde antes de entrar al tatami hasta después de salir de él ya que no todo es técnica en el Aikido; como poco también hay una etiqueta que cumplir, y qué mejor forma de aprenderla que observando a los demás, aunque esto tiene un esfuerzo añadido: hay que saber a quien mirar...

Ya sabéis, a partir de ahora en clase hay que observar más y hablar menos, que para eso ya están los bares. :p
Salu2

Comentarios

  1. Muy importante lo que nos transmites en tu articulo Jorge ! Estoy de acuerdo contigo en que observar tanto al maestro como a los compañeros nos aporta muchos detalles que de otra manera no obtendriamos, cada dia vemos algo nuevo que no habiamos apreciado y ello nos ayuda a continuar mejorando poco a poco...gracias !

    ResponderEliminar
  2. Estoy de acuerdo, como no puede ser de otra forma. Y me sumo a que hay días en los que mantener la concentración en clase puede resultar complicado debido a nuestro día a día.
    Pero bueno, conviene ir recordando conceptos básicos, que a veces con el tiempo se van olvidando.
    Saludos

    ResponderEliminar
  3. Veo que he conseguido transmitir el mensaje que pretendía ... me alegro!

    ResponderEliminar
  4. Lo primero es agradecer a Jorge y a todos los que colaboráis en el blog vuestro interés. Dicho esto os comento que habitualmente se utiliza mitori geiko para los casos en los que uno no puede practicar, habitualmente por lesiones, y se dedica a estar de miranda desde la barrera. Como bien dice Jorge no se trata ver, sino de observar. Si vamos más allá, no se trata de observar solo evidente, sino de intentar ver que principios hay detrás de las técnicas que se muestran.
    Finalmente, considero muy interesante el matiz de mirar a maestros y compañeros, pero no os olvidéis de echar un vistazo crítico hacia vosotros mismos ;)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Completamente de acuerdo, de hecho me decidí a escribir estas líneas tras un mitori geiko obligatorio en la clase de Guillermo. Sin embargo me pareció interesante enlazar el concepto de aprendizaje mediante la observación con el trabajo diario.
      Por último y a pesar de todo lo anterior, suele ser necesario alguna explicación de vez en cuando :p

      Eliminar

Publicar un comentario

Si piensas que tienes algo que decir al respecto no dudes en usar los comentarios. Tu opinión, siempre que sea respetuosa, es bienvenida.

Entradas populares